El queso es uno de los alimentos denominados “vivos”, aproximadamente 3 millones de microorganismos se encargan de que la leche se convierta en queso. Entonces ¿qué tenemos que hacer para conservar queso en casa?
Una vez fabricado, el proceso de curación sigue su curso gracias a los hongos y bacterias lácticas que componen el queso.
El calor acelera el proceso de curación, mientras que el frío lo ralentiza.
Es por eso que, a la hora de llevarnos un queso a casa, debemos tener en cuenta varios aspectos para su conservación.
Siempre es recomendable adquirir el queso entero ya que uno abierto (medio, cuñas etc) pierde un pequeño porcentaje de sus cualidades.
¿Cuanto dura un queso bien conservado?
Por norma general los quesos de pasta blanda se conservan menos tiempo que los quesos de pasta dura, ya que estos contienen un mayor porcentaje de agua, lo que hace que aumente el crecimiento de bacterias y hongos no deseados.
En definitiva, un queso de pasta blanda podrá aguantar alrededor de 15-20 días, mientras que un queso de pasta dura se conservará por varios meses si su conservación es la correcta.
Temperatura para conservar queso
Cuando dejamos un queso a temperatura ambiente, es decir, en contacto con el calor, tiende a sudar, esto hace que pierda grasa y como consecuencia se produce un cambio de textura y sabor.
Por eso para conservar y mantener las propiedades del queso hay que mantenerlo refrigerado la mayor parte del tiempo.
Debemos tener en cuenta que las temperaturas frías hacen que los quesos queden resecos y agrietados, por eso, dependiendo del tipo de queso, lo conservaremos a una temperatura u otra.
En general, podemos dividir lo quesos en dos grandes grupos:
- Quesos de pasta blanda (gorgonzola, camembert, brie etc)
- Quesos de pasta dura (manchego, parmesano etc).
Para conservar queso de pasta blanda debemos tenerlo a temperaturas entre 4ºC y 8ºC. Sin embargo, los quesos de pasta dura no requieren una temperatura tan elevada y los podremos mantener en óptimas condiciones entre 8ºC y 15ºC.
Algunos frigoríficos están equipados con departamentos especiales en los que la temperatura se mantiene entre 6ºC y 10ºC, si disponemos de este tipo de nevera, lo ideal es almacenar el queso en estos departamentos.
De lo contrario, debemos guardar nuestros quesos en el cajón de la verdura ya que es la zona menos fría, exceptuando el queso fresco que lo pondremos en la parte alta de la nevera debido a que su temperatura ideal de conservación son 4ºC.
6 métodos para conservar queso en casa
Ahora que ya hemos diferenciado los quesos en 2 grandes grupos y hemos visto la temperatura para conservar queso según su tipo de pasta, vamos a daos consejos o métodos para conservar vuestros quesos.
Un aspecto muy importante a tener en cuenta es que la grasa del queso absorbe los sabores por lo que, al conservarlo en la nevera, debemos contar con envoltorios o recipientes adecuados.
Conservar queso con papel Film
El papel film junto con el envoltorio original del queso es uno de los mejores métodos para conservarlo.
Cuando envolvamos el queso cortado con este plástico, debemos asegurarnos de que quede muy ajustado, ya que de esta forma evitamos que se forme una cámara de aire entre el queso y el film que por un lado haga proliferar el crecimiento de mohos no deseados, si el frigorífico tiene en su interior una alta humedad o se nos reseque mucho el corte si por el contrario en el frigorífico la humedad es muy baja.
Papel encerado o de horno para conservar tus quesos
Esta opción es muy similar a la anterior, se trata del papel que habitualmente se utiliza en carnicerías. En Quesos Gómez Moreno os facilitamos este tipo de papel al comprar los quesos enteros. Si no disponemos de este, el papel de horno cumple la misma función. Siempre comprobando que el queso quede bien envuelto.
Este tipo de papel que es una de las mejores opciones que os proponemos protege muy bien el queso tanto de la humedad como del aire seco, protegiendo perfectamente el corte y evitando que el queso pueda coger algún olor/sabor no deseado.
Recipientes herméticos para conservar queso en casa
Otra alternativa son los recipientes herméticos o tuppers. Si optamos por conservarlos de esta manera debemos estar atentos, ya que los quesos blandos pueden fermentar por la falta de oxígeno.
Es recomendable colocar en el fondo un papel de cocina para que absorba todo el líquido y la humedad que pueda soltar el queso.
Este papel debemos cambiarlo cada 2 o 3 días ya que puede fermentar y oler mal.
Conservar queso con paños húmedos
Este era el método que utilizaban nuestros antepasados para conservar los quesos.
Los paños o trapos de algodón húmedos son perfectos para conservar aquellos quesos que tengan moho en su superficie.
Conservación del queso en aceite de oliva
Consiste en sumergir el queso en un recipiente con aceite de oliva. Este método cambiará el sabor del queso, pero es uno de los más eficaces y utilizados cuando no existían los frigoríficos. Además, si queremos darle un toque especial podemos añadir hierbas aromáticas como romero, orégano, albahaca, etc…
Seguro que los amantes del queso en aceite Gómez Moreno ya conocíais este método.
Queseras de cristal para conserva queso
Las queseras de vidrio es otro de los métodos para conservar el queso, es este caso al estar el queso más expuesto, debemos de tener cuidado. Si el ambiente que tenemos es muy húmedo podemos poner dentro unos garbanzos secos o un poco de arroz crudo que absorberá la humedad excesiva y evitará o retrasará la que nos pueda aparecer en el queso.
No obstante, en la mayoría de los quesos, sobre todo en los quesos de pasta dura, el hecho que aparezca algo de moho en el corte no significa que el queso se haya echado a perder. Perfectamente se puede retirar esa parte con moho con un cuchillo y seguir disfrutando de nuestro queso favorito sin ningún riesgo para nuestra salud.
¿Podemos congelar el queso?
Esta pregunta crea bastante controversia y, es que, hay opiniones de todo tipo respecto a este tema.
¿Se puede congelar el queso? Si.
¿Es recomendable congelar queso? No.
Si decidimos congelar el queso, debemos tener en cuenta que al descongelarlo perderá sabor y textura. Los quesos de pasta dura se desmenuzarán a la hora de cortarlos y los quesos de pasta blanda se volverán granulosos.
Para que esto no ocurra, lo podemos congelar en porciones, de esta manera solo descongelaremos lo que vayamos a comer.
Siempre atempera el queso antes de comerlo
Pese a que os hemos recomendado conservar el queso siempre refrigerado a una temperatura entre 4 y 15 grados dependiendo del tipo de queso, es importante recordar que antes de comerlo y para poder disfrutar plenamente de todo su sabor y propiedades organolépticas, hay que dejar la porción de queso que nos vayamos a comer fuera de la nevera a temperatura ambiente al menos media hora.
Esperamos que todos estos trucos y consejos os ayuden a la conservación del queso en casa, y si tenéis algún truco especial esperamos que lo compartáis con nosotros en vuestros comentarios.